Aerotermia con Radiadores de Baja Temperatura en Granada

Cuando menor es la temperatura de impulsión con la que trabaja el radiador, mayor superficie de intercambio de calor se necesita. El problema del tamaño se soluciona con la configuración del propio radiador, como mencionábamos antes. Pero además, existe otra mejora que permite minimizar el tamaño del radiador, la ventilación forzada.
 
Consiste en incorporar un pequeño ventilador a la batería de intercambio en el interior del radiador. Esto consigue aumentar el caudal de aire, aumenta la potencia térmica y favorece la convección.
 
El ventilador entra en funcionamiento de forma inteligente, no requiere ningún tipo de acción por parte de los usuarios, y se pone en marcha en momentos de máxima demanda. Una vez alcanzada la temperatura adecuada el radiador la mantiene con el ventilador apagado.

Por lo tanto, podemos decir que los radiadores de baja temperatura son una buena alternativa para trabajar con sistemas de calefacción aerotermia si no queremos realizar grandes obras en la vivienda o local comercial.
 
No obstante, cuanto más eficientes sean todos los elementos que componen la instalación de calefacción (generador y sistema de emisión) mejores resultados obtendremos, lo que se traduce en mayor eficiencia y menor consumo energético.

Con la instalación de aerotermia, tanto si optamos por aprovechar los radiadores convencionales ya existentes en la vivienda, como si decidimos instalar radiadores de baja temperatura nuevos, estamos usando una energía limpia.
 
Si optamos por sustituirlos radiadores convencionales por radiadores de baja temperatura para aerotermia, conseguiremos aumentar la eficiencia energética del sistema. Según los estudios realizados, se calcula que se consigue un ahorro del 35% en la factura de calefacción en sistemas de aerotermia con radiadores de baja temperatura.
 
Los radiadores de baja temperatura, necesitan menor temperatura del agua para irradiar calor, su instalación es rápida y sencilla, sin apenas obras, y contienen un 80% menos de agua que los radiadores tradicionales.
 
Antes de comenzar la instalación del equipo de aerotermia con radiadores hay que llevar a cabo un estudio energético. Aquí se determinará el número de unidades suficientes, si hay que instalar algún radiador adicional en algún punto de la casa, si merece la pena conservar los antiguos radiadores o poner unos nuevos.
 
También deben realizarse pruebas de temperatura para determinar la temperatura a la que debe circular el agua, para ver su potencia.